Después del primer volumen de #Chica de serie B (aquí, su reseña), se asumía y agradecía la sana y divertida locura de Iván Sarnago. Pero tras leer el segundo tomo, culminación de la obra, sólo queda levantarse y aplaudir por la frescura, el ingenio y las ganas que tiene el autor burgalés de reírse absolutamente de todo. No hay tabúes para Sarnago, todo es susceptible de ser objeto de sus gags, desde las alusiones frikis más diversas hasta su propia vida sexual, y todo es tan descabellado y delirante que parece imposible no sucumbir a las risas que persigue.
En este segundo y último volumen, Sarnago homenajea a autores de cómic, desde Frank Miller a Jan, incluye a alguno que otro como Jordi Bayarri como personaje, mezcla diferentes tiras que complementan a la original (Brenda B!, Zombisaurios o La Arqueóloga!) y llega hasta un final delirante que tiene lugar en el Salón del Cómic de Barcelona y que le sirve para cambiar por completo el formato de su narración para pasar de la tira del webcómic al cómic book tradicional. Esa es otra de las bromas que gasta un autor en plena forma, que hasta se ríe con el lector de sus propias ocurrencias, rompiendo por completo no ya la cuarta pared sino cualquier barrera que haya a uno y otro lado de las viñetas.